Los abogados de Da Silva insistieron en que la denuncia presentada la semana pasada por parte dela fiscalía y la cual fue aceptada ayer por el juex carece de “pruebas”.
“Ni los defectos formales de la pieza de acusación ni la ausencia de pruebas contra Lula, como ha reconocido de manera amplia la comunidad jurídica, impidieron que el referido juez llevara adelante lo que hace mucho tiempo dejó claro que haría: imponer un crimen que jamás practicó”, así lo dio a conocer un comunicado fijado por los abogados, Cristiano Zanin Martins y Roberto Teixeira.
La defensa volvió a destacar la “pérdida de imparcialidad” del magistrado, un hecho que ya fue denunciado ante la Justicia brasileña y que todavía debe ser analizado.
Sin embargo, aseguraron que la decisión de Moro por abrirle un proceso a Lula da Silva no los agarro por sorpresa, puesto que ya se lo esperaban debido al historial del juez de “persecución y violación de las garantías fundamentales” en Brasil.
Sergio Moro, expresó que Lula, quien fungió como presidente de Brasil en el año 2003 y en el 2011, será juzgado por sospechas de que aceptó 3,7 millones de reales, es decir, unos 1,11 millones de dólares, en sobornos como parte del gigantesco escándalo de la petrolera local, Petrobras.
La decisión de Moro podría evitar que Lula da Silva protagonice un regreso político en la campaña para las elecciones presidenciales de Brasil del 2018.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: EFE