Belmonte señaló que la medalla era el premio de muchas días de trabajó duro, pese a haber pensado en más de una ocasión que no valía la pena.
Sin embargo, durante Mireia no se inquietó por el casi segundo de ventaja que le llevaba la australiana Madeline Groves al pasar los 50 metros.
Fueron 50 metros finales en los que Belmonte tuvo que recurrir a su capacidad de sacrificio para resistir el ataque de la japonesa, Natsumi Hoshi, la vigente campeona mundial y sobre todo, para aguantar el ataque final de Groves en los últimos metros.
Pero nadie logró impedir que la española se colgara el oro en el podio y alcanzara su sueño al proclamarse campeona olímpica.
Tres centésimas de segundos le dieron la victoria a la española, permitiendo así que está hiciera historia al ser la primera nadadora de su país en subir al podio y colgarse el oro.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: EFE