
La madrugada del pasado martes fue asesinado José Santamaría Zavala, alcalde de Huehuetlán el Grande, una localidad ubicada en estado mexicano de Puebla, mientras viajaba por una carretera rumbo a su hogar.
Una fuente de la fiscalía de Puebla confirmó a EFE la muerte a balazos del presidente municipal, militante del izquierdista Movimiento Ciudadano. Con este se contabilizan 3 muertes de jefes ediles en 10 días en el México.
El cuerpo del edil fue hallado a un costado de su automóvil sobre la carretera Huehuetlán El Grande, a la altura del kilómetro 10, en el paraje conocido como Tonale.
La fiscalía estatal señaló en un comunicado que “tanto la víctima como la unidad presentaban impactos con arma corta calibre 9 milímetros”, y precisó que investiga el intento de robo como móvil del homicidio, aunque no descarta otras líneas.
Según el testimonio de una persona que acompañaba al alcalde, sobre la carretera había piedras para impedir el paso de la camioneta.
Una vez detenidos, los presuntos asaltantes exigieron el dinero de la nómina, pero “el robo no se consumó, en virtud de que no llevaban recurso alguno en la camioneta”, indicó la institución.
El 24 de julio, el alcalde de Pungarabato (estado de Guerrero), Ambrosio Soto Duarte, fue emboscado en una carretera y baleado en su vehículo junto con el conductor. Previamente, había recibido amenazas del crimen organizado.
Un día antes, Domingo López González, alcalde de San Juan Chamula (Chiapas) fue asesinado en la plaza local en un incidente con un grupo de pobladores que lo increpaba por una obra pública. Las detonaciones también causaron la muerte de otras cuatro personas.
Maholy Leal Medina/EV Houston/EFE / Foto: Cortesía Expansion.mx