
La detención se realizó a tan solo un día de la llegada del Papa Francisco a la Jornada de la Juventud a celebrarse en Cracovia, donde miles de peregrinos de diferentes partes del mundo se reunirán para participar en el evento.
El iraquí, no tiene dirección permanente en Polonia, por lo que permanecerá detenido preventivamente los próximos dos meses y podría ser condenado a ocho años de prisión por tenencia ilegal de explosivos, así lo señaló la fiscalía.
Mariusz Blaszczak, ministro del Interior polaco, aseguró que no hay constancia de que exista alguna amenaza terrorista en dicho país, por lo que volvió a culpar a las políticas del multiculturalismo como principal responsable de la situación de inseguridad que se vive en Europa.
“Para mí no hay duda de que los problemas que ahora enfrentan nuestros vecinos son el resultado de décadas de política de inmigración, de la política del multiculturalismo y de que se ha venido aceptado durante años a inmigrantes de Oriente Medio y Norte de África que no se integran en la sociedad europea”, afirmó.
Ante la inminente llegada del Papa este miércoles las autoridades polacas han iniciado el primer nivel de alarma nacional, aunque el ministro de Interior precisó que dicha decisión no responde a ninguna amenaza concreta.
Por otro lado, resaltó que se trata mayormente de una medida preventiva para reforzar la presencia de las fuerzas de seguridad y evitar algún posible incidente.
Iveth Villalobos / EV Houston / EFE / Foto: EFE