
El portavoz del Ministerio austríaco del Interior, Karl-Heinz Grundböck, indicó que Austria y la República Checa han vuelto al mismo nivel de vigilancia que tenían en sus fronteras con Alemania antes del tiroteo realizado por un atacante suicida este viernes en un centro comercial de Múnich, y donde murieron nueve personas.
Grundböck aseguró que la seguridad fue reforzada en la frontera por el temor de que los supuestos atacantes intentaran huir del país, por lo que Austria ha vuelto al nivel de alerta terrorista que mantiene desde el atentado a la revista francesa “Charlie Hebdo” en el 2015.
A su vez, confirmó que han regresado 42 agentes de la unidad antiterrorista “Cobra” y los cuales fueron enviados anoche a Múnich para apoyar a los colegas alemanes, a petición de las autoridades del país vecino.
Sin embargo, el ministro del Interior de República Checa, Milan Chovanec, expresó este sabado que la policía de su país retiró las patrullas adicionales que había enviado a la zona fronteriza, ya que dichas unidades se consideraron innecesarias después de conocer que el tiroteo que hubo fue por un atacante que se suicidó, y no por tres personas en fuga como se pensó durante varias horas.
A pesar de que la alerta ha bajado, Chovanec afirmó que tiene previsto reunirse hoy con miembros del servicio de inteligencia checos para valorar la situación vivida.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: EFE