
El caso se produjo en Artigas, a unos 500 kilómetros al norte de Montevideo, así lo señaló un comunicado de la fiscalía de esa localidad.
La víctima de 10 años de edad “concurría a jugar y escuchar música asiduamente a la casa de su amiga de la misma edad”, indica la nota.
“En esas circunstancias aprovechando momentos en que su esposa estaba trabajando, el abusador mandaba a su hija al almacén (mercado) para quedarse a solas con la pequeña y procedía a manosearla en sus genitales”, relata.
La situación se prolongó por un año hasta que la hija del hombre fue testigo de la conducta de su padre. Entonces le comentó a su amiguita “que sabe lo que su papá le está haciendo, que tiene mucho miedo de su padre y que nadie les va a creer, por lo que ambas planean filmar tal situación”.
El crudo relato estampado en páginas de la Fiscalía General de la Nación, da cuenta de que las niñas se sometieron una vez más a la agresión con tal de que el hombre fuera detenido.
“Esta acción tan valiente de una niñita abusada debería servir no solo para que se haga justicia, sino para que toda la sociedad tome conciencia de que estas cosas pasan con más frecuencia de la que creemos y que los niños no mienten”, expresó un funcionario.
La justicia tomó las pruebas entregadas y luego de verificarlas, procedió con la detención del sujeto quien ya se encuentra en prisión.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: Creative Commons