“Se prohíbe en todo el territorio nacional las reuniones y manifestaciones públicas, concentraciones de personas y cualquier otro acto similar, que puedan perturbar o afectar el normal desarrollo del proceso electoral”, dijo este jueves Néstor Reverol, ministro de Interior.
Quien “organice, sostenga o instigue” acciones que interfieran con “la organización y funcionamiento del servicio electoral” será “penado con prisión de cinco a diez años”, señaló el ministro por medio de una rueda de prensa a tan solo un día de la marcha opositora.
Según indicó Reverol delante de la presidente del poder electoral, Tibisay Lucena; el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino; y el jefe del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada, almirante Remigio Ceballos, la seguridad del proceso está garantizada.
Sin embargo, la oposición venezolano anunció un “boicot” contra las votaciones, en medio de las protestas que se llevan a cabo desde hace casi cuatro meses y que han dejado más de 100 muertos.
El ministro de Interior y Justicia informó que fueron activados 96 puntos para procesar ante tribunales civiles y militares los delitos que se cometan “antes, durante y después de la jornada electoral”.
Lucena aseguró que el Consejo Nacional Electoral (CNE) está “en tranquilidad, pero en alerta”.
Un total de 146.000 policías, bomberos y efectivos de protección civil se desplegarán para apoyar a los militares para custodiar los centros de votación.
EV Houston Newspaper / Foto: EFE