Cuando escuchamos repetidamente que existen algunos tipos de trabajos que han sido o serán eventual e inequívocamente sustituidos por robots, lo primero que se nos viene a la mente, para malestar de muchos profesionales en estas áreas, son los relacionados a servicios de traducciones de textos multilingües, escritorios de ayuda, taxistas, policías de tránsito, servicio/envío de comida a domicilio, trabajadores en líneas de producción/ensamblaje automotriz/aeronáutico, operadoras/agentes telefónicas de servicios bancarios/financieros, y un largo y preocupante “etcétera”.
Cuando vemos que ya existen taxis voladores que no son tripulados por “aero-taxistas”, los cuales estarán pronto en Emiratos Arabes Unidos (siendo el emirato de Dubai el pionero), nos conduce a reevaluar nuestros paradigmas y nos hace ver que el futuro sigue acelerando su paso de manera contundente e irreversible.
Hasta no hace mucho tiempo una adquisición de alguna empresa por otra generaba muchas expectativas y acciones a cubrir (principalmente del punto de vista financiero, operativo y legal-regulatorio). La evaluación de litigios pendientes de una parte u otra, y su impacto en la convergencia empresarial, ha sido quizás la mayor preocupación de la gerencia al conducir proyectos de fusión. No estaban planteados de manera absoluta los elementos de seguridad (o inseguridad) informática, como lo es hoy en día con empresas que están expuestas a internet, al comercio electrónico Business-to-Business o Business-to-Consumer vía internet y extranets, a la disponibilidad de los servicios, a los niveles de acceso o a la ubicuidad.
Repasando una de las mayores adquisiciones tecnológicas que se están gestando hoy por hoy, tenemos la gran adquisición del portal informativo y de búsquedas Yahoo (YHOO-NASDAQ) por parte del gigante de telecomunicaciones Verizon (VZ-NYSE), la cual se espera concluya en el segundo trimestre de 2017. Esta adquisición ha despertado el interés de muchos, no principalmente por su visible etiqueta de $4.500 millones, si no por vulnerabilidades existentes en los esquemas de seguridad del sitio yahoo.com, el cual habia sufrido significativas brechas informáticas de la mano de hampones cibernauticos. Esto hizo que la etiqueta se viera significativamente reducida por $350 millones durante las negociaciones.
Este “reciente” tipo de factor externo vulnerante, al igual que todos aquellos trabajos en los que eventualmente venza la robótica ante la especie humana, son los protagonistas hoy en día de estas significativas adquisiciones o de la manera cómo se conduce un negocio. Estos elementos seguirán ganando más terreno en la medida que la tecnología vaya reemplazando al ser humano y nos adentremos más aun en los conceptos de la Nueva Economía (nueva desde hace unos 15 años, según mi apreciacion). Aún falta mucho por desarrollar, descubrir e imponer, pero lo cierto es que nuestro mundo ha ido evolucionando y cada vez más nos encontramos con nuevos y más modernos equipos y tecnología, que están modificando nuestros paradigmas, aumentando nuestras eficiencias, así como contribuyendo a que nuestros diccionarios (en todos los idiomas) estén siendo constantemente revisados y actualizados.
Esta moderna adquisición ha despertado gran interés en el mundo corporativo, y muy específicamente en todos aquellos inversores del mercado bursátil tradicional y electrónico, quienes lejos de ver oportunidades de negocio, ven como los elementos de la Nueva Economía son los que imperan a la hora de gestar dichos negocios.
Douglas Chemaly / Foto: Referencial