El presidente estadounidense, Barack Obama, dijo hoy que su Gobierno está tomando las “precauciones debidas” frente a un posible contagio del ébola durante la Cumbre de Líderes Africanos que se celebra en Washington la próxima semana.
“Esto es algo que nos tomamos muy en serio”, afirmó hoy Obama durante una comparecencia imprevista en la Casa Blanca en la que repasó los temas más candentes de la actualidad internacional.
Señaló, en ese sentido, que las personas que vengan de los tres principales países afectados, Guinea, Liberia y Sierra Leona, serán examinados cuidadosamente para descartar que están infectados con un virus que se ha cobrado ya más de 700 vidas en África Occidental.
El gobernante destacó que el virus “no se transmite fácilmente” pero aun así reconoció que el actual brote es “más agresivo” que en el pasado.
Según las autoridades sanitarias norteamericanas, la epidemia es la peor desde que se identificó el virus en 1976.
Más allá del ébola, Obama hizo hoy hincapié en que la cumbre de la próxima semana, a la que se espera asistan unos 50 líderes del continente ,”no tiene precedentes”.
“Va a ser una conferencia increíble”, destacó el gobernante.
Hizo hincapié, por lo demás, en la necesidad de que Estados Unidos refuerce su apuesta por África, continente en el que se encuentran, dijo, seis de las diez economías de mayor crecimiento del mundo.
Mencionó, en ese sentido, que China, Brasil e India están haciendo ya grandes inversiones en la región y recordó que “es uno de los continentes en los que Estados Unidos es más popular”.
Dijo creer que la relación con África no debe de concentrarse exclusivamente en ofrecer ayuda a la región, sino en potenciar las relaciones empresariales y reforzar la cooperación en asuntos de seguridad.
Desde la llegada a la Casa Blanca de Obama, EE.UU. ha aportado cerca de 9.000 millones de dólares a las operaciones de paz de las Naciones Unidas en África.
Bromeó, por lo demás, que la próxima será una mala semana para circular por Washington.
Riesgos de contagio
Por su parte, representantes del Hospital Universitario de Emory de Atlanta (EE.UU.) descartaron hoy que exista el riesgo de un contagio masivo con la llegada de dos pacientes de ébola en los próximos días a sus instalaciones.
“Contamos con una gran cantidad de medidas de seguridad en nuestro hospital y no creemos que exista un riesgo para las personas que trabajan o vienen a nuestro hospital”, declaró en conferencia de prensa Bruce Ribner, uno de los médicos de Emory que estará en contacto directo con los pacientes.
El centro hospitalario confirmó que en los próximos días recibiría a dos pacientes con ébola, dos voluntarios estadounidenses que trabajaban en el cuidado de pacientes en Liberia: el médico Kent Brantly y la misionera Nancy Writebol.
Los pacientes se encuentran en condición grave pero estable tras haber recibido tratamiento experimental en el país africano, uno de los más afectados por el peor brote de ébola en la historia junto con Guinea y Sierra Leona.
“Hace una hora recibí información de que ambos pacientes están en condición estable para poder ser trasladados (a Atlanta)”, señaló.
De acuerdo con Ribner, la unidad en la que serán internados los dos pacientes ha sido utilizada anteriormente para tratar a pacientes con SARS y está en un área separada del hospital.
El avión ambulancia ya se encuentra en el país africano y el Pentágono anunció hoy que regresará a Estados Unidos en los próximos días y utilizará la base militar de Dobbins, localizada 16 kilómetros al noroeste de Atlanta.
Pese a que no existe una cura o vacuna contra esta mortal enfermedad, los médicos de Emory confían en que el traslado de ambos pacientes a Atlanta pueda brindarles el cuidado médico necesario para ayudarles a vencer la enfermedad.
“Si estos pacientes tuvieran el cuidado que ofrece un sistema de salud como el nuestro, la mortalidad sería menor”, aseguró el galeno.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en este último brote de la enfermedad se han registrado 1.323 contagios y 729 muertes.
EFE / foto: EFE