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Expertos explican cuál es la tasa de mortalidad del nuevo coronavirus y por qué sigue cambiando.
El cálculo se realizó comparando la cifra de individuos con casos confirmados de COVID-19 con el número de personas que fallecierona causa de él. A medida que ambos números crecían, la proporción estaba destinada a cambiar.
La cifra del 2% parecía estable el 24 de febrero, cuando un estudio masivo entre casi 45.000 pacientes chinos cuyas infecciones habían sido confirmadas con pruebas de laboratorio reportó una tasa de letalidad de 2.3%.
Más tarde, el 28 de febrero, un estudio de casi 1.100 pacientes chinos sugirió una tasa de mortalidad más baja, del 1.4%. Cuatro días después, el 3 de marzo, la Organización Mundial de la Salud informó que la tasa de mortalidad global era del 3.4%.
¿Cómo podría haber cambiado tanto en tan poco tiempo?
“Es difícil decir cuáles son las tasas de letalidad hasta que esto se asiente”, indicó el Dr. George Rutherford, epidemiólogo y experto en enfermedades infecciosas de la Universidad de California en San Francisco.
Asimismo, admitió que no es una estadística para mirar de forma continua, pese a que lo haga tanto como todos los demás. Eso incluye a miembros del Congreso.
El pasado miércoles le preguntaron al Dr. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, qué estaba pasando. Los instó a no obsesionarse tanto con la tasa de mortalidad, enfatizando que los científicos aún tienenque aprender al respecto.
La mayor incertidumbre rodea la cantidad de personas infectadas con el coronavirus. El recuento oficial superó los 100.000, pero el número real es probablemente mucho más alto.
Los científicos sospecharon que muchos pacientes que experimentaron sólo síntomas leves nunca vieron a un médico y por lo tanto, jamás se hicieron una prueba de laboratorio oficial para ver si estaban infectados. Como resultado, no se incluyeron en la tasa de letalidad.
Cabe destacar que la tasa de mortalidad puede cambiar en el transcurso de un brote. Por ejemplo, los autores del estudio de casi 45.000 pacientes chinos notaron que la tasa de letalidad en Hubei, provincia en el centro del brote, fue de 2.9%. En otras partes de China, fue del 0.4%.
Es posible que a medida que China tenga más completo el conteo de muertes, la tasa de mortalidad fuera de Hubei aumentará. Pero también es posible que la diferencia sea real porque las autoridades de salud pública fuera de Hubei tuvieran la oportunidad de prepararse para el coronavirus, para que las personas no mueran al mismo ritmo que antes, según Rutherford.
En UCSF, por ejemplo, los médicos están preparados para tratar el coronavirus en una instalación de contención establecida en el estacionamiento de la sala de emergencias, dijo.
Otros países informan diferentes tasas de mortalidad.
Con 6.767 casos confirmados hasta el viernes por la noche, Corea del Sur tiene más pacientes con coronavirus que cualquier otro país además de China. Ese alto número puede ser en parte una consecuencia del amplio programa de pruebas del país que involucró a miles de personas. Cuando se compara con las 44 muertes del país, el índice de letalidad es inferior al 0.7%.
Esa cifra puede ofrecer una mejor idea sobre la verdadera tasa de mortalidad de COVID-19, según el Dr. Jeremy Faust, médico de emergencias en el Hospital Brigham and Women en Boston e instructor en la Facultad de Medicina de Harvard.
“Al examinar a tanta gente, pudieron en realidad encontrar más casos”, declaró Faust. “Significa que notaron que la enfermedad estaba en todas partes, y no mata a tanta gente”.
“Mientras más pruebas hagas, más precisos serán tus números”, agregó.
Rutherford predijo que para cuando la expansión se calme, la tasa de letalidad general para el COVID-19 caerá a entre 1% y 2%.
Fauci concuerda en que la tasa de mortalidad podría llegar a ser tan baja como 1%. Pero incluso si ese es el caso, consideró, aún sería 10 veces peor que la tasa promedio de letalidad por la gripe estacional.
Con información de Los Ángeles Times….