Cuando faltan casi cuatro años para el inicio de la próxima Copa del Mundo en Qatar, un evento que se espera ayude a disminuir las tensiones regionales, las autoridades futbolísticas aún deben decidir si el torneo planetario será el primero que disputen 48 selecciones.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, ha estado presionando en las últimas semanas para que el Mundial de 2022 se expanda de los 32 equipos que participaron en Rusia 2018 a 48, a pesar de que previamente se había planeado que la expansión sucediera cuando Canadá, México y Estados Unidos sean conjuntamente sede del evento en 2026.
“Lo estamos analizando. Si es posible, ¿por qué no?”, dijo Infantino el mes pasado. “Estamos hablando con nuestros amigos de Qatar, estamos hablando con nuestros muchos otros amigos en la región y esperamos que esto pueda suceder”.
Qatar aún no ha respondido a esa idea, pero anteriormente se había mostrado cauteloso sobre la capacidad del país para organizar un torneo con 16 selecciones más.
Los organizadores están construyendo solo ocho estadios para el torneo que se prolongará por un mes, el cual fue polémicamente retrasado hasta fines de 2022 debido al intenso calor del verano en Qatar. El torneo, que el miércoles inicia una cuenta regresiva de cuatro años para su inicio, se desarrollará entre el 21 de noviembre y el 18 de diciembre.
Cualquier expansión haría que Qatar posiblemente comparta algunos partidos con sus vecinos, pero el país está sujeto a un bloqueo económico impuesto por cuatro de ellos.
A mediados de 2017, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Egipto cortaron vínculos de transporte y comercio con Doha, al que acusan de apoyar el terrorismo, acusaciones que Qatar niega.
Con información de Reuters