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Sudáfrica está considerando administrar una vacuna COVID-19 que aún se encuentra en la fase de prueba a los trabajadores de salud, tras suspender el lanzamiento de otra vacuna que según datos preliminares, podría ser mínimamente efectiva contra la variante del coronavirus.
El país estaba luchando el lunes para idear una nueva estrategia de vacunación después que detuvo el uso de la vacuna AstraZeneca, que es más barata y más fácil de manejar que algunas otras y que muchos esperaban fuera crucial para combatir la pandemia en los países en desarrollo.
Entre las posibilidades que se están considerando: mezclar la vacuna AstraZeneca con otra o administrar la vacuna de dosis única de Johnson & Johnson, que aún no ha sido autorizada para su uso en ningún lugar, a 100,000 trabajadores de la salud mientras se monitorea su eficacia contra la variante.
“No podemos esperar. Ya tenemos buenos datos locales”, dijo la Dra. Glenda Gray, directora del Consejo de Investigación Médica de Sudáfrica, quien dirigió la parte sudafricana del ensayo global.
El cambio en la estrategia se debió a los resultados preliminares de un pequeño estudio, el cual mostró que la vacuna AstraZeneca solo era mínimamente efectiva contra casos leves a moderados de la enfermedad causada por la variante.
La doctora hizo hincapié en que los ensayos clínicos muestran que la vacuna J&J es segura y como la de AstraZeneca, también es más fácil de manipular que las vacunas supercongeladas de Pfizer y Moderna.
Con información de Fox 26 Houston / Traducción: EVH…