La Asamblea Nacional de Venezuela declaró como “terrorismo de Estado” las acciones de los grupos de civiles armados que obedecen las órdenes del régimen madurista, mejor conocidos como colectivos.
El grupo de diputados pidió además a la comunidad internacional calificarlos como grupos terroristas, hecho que podría conducir a nuevas sanciones.
También señalaron que remitirán los crímenes de los colectivos al Tribunal Penal Internacional (TPI), puesto que estos califican como violaciones de los Derechos Humanos.