El periódico Juneau Empire, informó que las temperaturas inusualmente altas registradas este verano causaron la muerte de una gran cantidad de salmones en Alaska (EE.UU.).
El medio recopiló los resultados de un estudio realizado por la Comisión intertribal de peces de Yukón que viajó hasta el río Koyukuk, al oeste del estado, para evaluar el alcance del problema.
Los científicos detectaron allí 850 peces muertos, aunque temen que esta cantidad podría ser solo la punta del iceberg.
Según una de las científicas, Quinn Davidson, estas muertes se debieron a la inusual ola de calor que experimentó la región en los últimos tiempos.
“Abrimos los peces, buscamos alguna enfermedad, infecciones, parásitos. Según todos los indicios, los peces parecían saludables”, declaró la experta.
“No tenían ninguna marca, ninguna señal de enfermedad o estrés. Y el fenómeno de mortandad coincide con la semana de calor que tuvimos”, agregó.