Foto: Pixabay
Hay muchos suplementos en las tiendas que dicen poder ayudarte a estimular tu sistema inmunológico. Pero lograr esto es en realidad mucho más difícil de lo que podrías pensar, y por una buena razón.
Tu sistema inmune es increíblemente complejo. Tiene que ser lo suficientemente fuerte y sofisticado como para combatir una variedad de enfermedades e infecciones, pero no tan fuerte que reaccione de forma innecesaria, causando alergias y otros trastornos autoinmunes. Para operar en un equilibrio tan delicado, tu sistema inmunológico está estrictamente controlado por una variedad de entradas.
Pese a la complejidad del asunto, existen hábitos de vida cotidianos en los que puedes concentrarte para ayudar a darle a tu sistema inmune lo que necesita para combatir una infección o enfermedad. Aquí hay cinco formas respaldadas por la ciencia para garantizar que tu sistema inmunológico tenga todo lo que necesita para funcionar de manera óptima, así como por qué no debes confiar en los suplementos para estimular su sistema inmunológico.
Mantener una dieta saludable.
Como con la mayoría de las cosas involucrando tu cuerpo, una dieta saludable es clave para un sistema inmunológico fuerte. Esto significa comer muchas verduras, frutas, legumbres, granos integrales, proteínas magras y grasas saludables.
Además de proporcionarle a tu sistema inmune la energía que necesita, una dieta saludable puede ayudarte a obtener cantidades suficientes de micronutrientes que desempeñan un papel en el mantenimiento del mismo:
Vitamina B6, que se encuentra en pollo, salmón, atún, plátanos, vegetales verdes y papas
Vitamina C, que se encuentra en los cítricos, incluidas las naranjas y las fresas, así como en los tomates, el brócoli y las espinacas.
Vitamina E, que se encuentra en almendras, aceite de girasol, semillas de girasol, mantequilla de maní y espinacas.
Dado que los expertos creen que tu cuerpo absorbe las vitaminas de manera más eficiente a partir de fuentes dietéticas, en lugar de suplementos, la mejor manera de apoyar tu sistema inmune es comer una dieta bien equilibrada.
Haz ejercicio regularmente
La actividad física no es solo para desarrollar músculos y desestresarse, también es una parte importante de estar saludable y apoyar un sistema inmunológico saludable.
Una forma en que el ejercicio puede mejorar la función inmune es aumentando la circulación general, lo que facilita que las células inmunes y otras moléculas que combaten las infecciones viajen más fácilmente por todo el cuerpo.
De hecho, estudios han demostrado que realizar tan solo 30 minutos de ejercicio moderado a vigoroso todos los días ayuda a estimular tu sistema inmunológico. Esto significa que es importante concentrarse en mantenerse activo y hacer ejercicio regularmente.
Hidratate!
El agua juega muchos papeles importantes en tu cuerpo, incluido el apoyo a tu sistema inmunológico. Un líquido en tu sistema circulatorio llamado linfa, que transporta importantes células inmunes para combatir infecciones alrededor de su cuerpo, está compuesto en gran parte de agua. Estar deshidratado ralentiza el movimiento de la linfa, lo que a veces conduce a un sistema inmunitario deteriorado.
Incluso si no estas haciendo ejercicio o sudando, estas constantemente perdiendo agua a través de la respiración, así como a través de la orina y las deposiciones. Para ayudar a mantener tu sistema inmunológico, asegúrate de reemplazar el agua que pierdes.
Dormir lo suficiente
El sueño ciertamente no se siente como un proceso activo, pero hay muchas actividades importantes que suceden en su cuerpo cuando no está despierto, incluso si no se da cuenta. Por ejemplo, se crean importantes moléculas que combaten las infecciones mientras duermes.
Los estudios demuestran que las personas que no duermen lo suficiente son más propensas a enfermarse después de la exposición a virus, como las que causan el resfriado común. Para darle a tu sistema inmune la mejor oportunidad de combatir infecciones y enfermedades, es importante saber cuánto sueño debes dormir cada noche, así como los pasos a seguir si no estas descansando lo suficiente.
Minimiza el estrés
Ya sea que se presente rápidamente o se desarrolle con el tiempo, es importante comprender cómo el estrés afecta tu salud, incluido el impacto que tiene en tu sistema inmunológico. Durante un período de estrés, particularmente el estrés crónico que es frecuente y duradero, tu cuerpo responde iniciando una respuesta al estrés. Esta respuesta al estrés, a su vez, suprime su sistema inmunológico, lo que aumenta su probabilidad de infección o enfermedad.
El estrés es diferente para todos, y también cómo lo aliviamos. Dado el efecto que puede tener en tu salud, es importante saber cómo identificar el estrés. Y, ya sea respiración profunda, mediación, oración o ejercicio, también debe familiarizarse con las actividades que lo ayudan a reducir el estrés.
Con información de Houston Methodist / Escrito por Katie McCallum / Traducido por EVH…
