Foto: EVH / Fotografía original tomada del CDC
Más de 300 personas están siendo capacitadas en el condado de Harris para convertirse en rastreadores del COVID-19 como parte de los esfuerzos del condado para frenar la propagación de la enfermedad, según dijo la jueza del condado de Harris, Lina Hidalgo.
Las declaraciones de Hidalgo dieron lugar tras hablar con una clase de aprendices en el Departamento de Salud Pública del Condado de Harris. Ella dijo que algunos de los que se convertirán en ‘rastreadores’ son personas que han perdido sus trabajos debido a la pandemia. Otros son simplemente voluntarios.
La jueza explicó que el dinero utilizado para pagar a los rastreadores proviene de fondos federales asignados al condado como parte de la Ley CARES.
¿Qué hace un rastreador?
Como su nombre lo indica, los rastreadores y sus supervisores estarán monitoreando los pasos de un paciente con coronavirus para determinar quién más puede haber estado expuesto a la enfermedad. El objetivo es aislar a esas personas para contener la propagación del virus.
“Esta es una estrategia de salud pública que hemos utilizado durante décadas”, dijo el Dr. Umair Shah, autoridad de salud del Condado de Harris.
Los rastreadores reciben capacitación en metodología de rastreo, así como en leyes relacionadas con la privacidad de la información de salud, dijo Hidalgo.
¿Qué preguntarán los rastreadores?
El Dr. Umair Shah, autoridad de salud del Condado de Harris, dijo que los rastreadores harán preguntas sobre dónde ha estado la persona, con quién ha estado y si ha estado en alguna reunión importante. Los profesionales también preguntarán sobre los compañeros de trabajo en caso que el paciente haya regresado al lugar de trabajo.
¿Qué cosas no preguntarán los rastreadores?
Hidalgo dijo que los rastreadores del condado nunca pedirán números de Seguro Social, información de cuenta bancaria o información de tarjeta de crédito.
“Protegemos celosamente la información de salud privada”, dijo Hidalgo.
No volvemos a la normalidad
La cantidad de rastreadores desplegados se basa en una tasa manejable de nuevas infecciones, dijo Hidalgo. Dijo que si las personas comienzan a salir demasiado pronto, el número de casos nuevos podría ser demasiado grande para que los rastreadores lo mantengan, lo que hará que sea mucho más difícil contener un brote.
“Hay que tratar esto con la seriedad que merece”, dijo Hidalgo.
La jueza dijo que las personas que puedan quedarse en casa deberían continuar haciéndolo.
Con información de Aaron Barker, Click2Houston… / Traducción: EVH.