Tres miembros del servicio militar de Estados Unidos murieron y otros tres resultaron heridos por un artefacto explosivo improvisado en el sur de Afganistán, durante una misión de entrenamiento dirigida por la OTAN.
Entre los heridos se encontraba un contratista, el cuál fue evacuado junto los miembros del servicio militar y se encuentra recibiendo atención médica.
Los talibanes reivindicaron el ataque, indicando que iba dirigido contra un “convoy estadounidense”, según un comunicado de su portavoz Zabihulá Mujahid.
Hasta el momento, cinco miembros del servicio han muerto en Afganistán en noviembre, el mes más letal para las fuerzas estadounidenses este año.