El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) reveló este martes que en 2017 más de 600 mil extranjeros se han quedado en el territorio y sobrepasado la validez de su visa, convirtiéndose así en inmigrantes indocumentados en riesgo de deportación.
Es importante resaltar que esa cifra solo representa el 1.15% de los más de 52 millones de extranjeros que ingresaron de forma legal por aire y puertos marítimos en 2017 y ha disminuido un 1.25 por ciento con respecto al año anterior. Sin embargo, marcó el segundo año consecutivo en que más de 600,000 visitantes se quedaron después de haber caducado su visado.
En este sentido, el reporte indica que la inmigración ilegal en la frontera con México encuentra en los mínimos histórico, en 2017 solo unas 300,000 personas fueron capturadas por las autoridades, a diferencia de los 1.7 millones del año 2000
Por su parte, el Departmento habría realizado mejoras en 2017 para asegurarse que los extranjeros salieran del país cuando fuera necesario, al continuar con las pruebas de los procesos biométricos en los distintos puertos marítimos y aéreos, los cuales fueron incluidos en una orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump al principio de su mandato.
Los funcionarios comenzaron a enviar correos electrónicos a los extranjeros que formaban parte del Programa de Exención de Visas cuando se acercaba el final de sus visitas. Los ciudadanos de 38 países, principalmente en Europa, forman parte del programa, que les permite visitar los Estados Unidos por hasta 90 días sin obtener primero una visa.
A pesar de esas mejoras graduales, el informe reconoce que “no hay ninguna causa específica que pueda atribuirse directamente a la disminución en las tasas de sobreestadía” en 2017.