El juez del Tribunal Supremo, John Roberts, manifestó su desaprobación contra el mandatario Donald Trump ante sus ataques a la independencia judicial.
Roberts, respondió a un pronunciamiento del presidente donde aseguró que los magistrados nombrados por el ex presidente Obama obstruyen muchas de sus medidas.
Ante ello, el líder del alto tribunal respondió que no se tienen jueces de Obama o jueces de Trump, Bush o Clinton, sino un grupo extraordinario de jueces dedicados que dan su mejor nivel por la igualdad de derechos de quienes están delante de ellos. Asimismo, constató que esa independencia judicial es algo que se debería agradecer.
La Corte Suprema desde el mandato de Trump se ha visto inclinada hacia el conservadurismo, puesto que cinco de los magistrados que lo componen han sido nombrados por presidentes republicanos y cuatro de ellos por demócratas.