Talento y gracia son dos cosas que nacen con uno, y algunos tienen ¡para derrochar! Así es nuestro excelente comediante Emilio Lovera, “El hombre de las mil caras”, quien llegará este próximo 6 de octubre al Stafford Centre junto a Laureano Márquez, en “Histeria de Venezuela”, una obra llena de emociones que busca enseñar varias lecciones para mejorar nuestro país, y quien muy amablemente accedió a esta entrevista para El Venezolano de Houston.
¿Cuándo descubriste que el humor era importante en tu vida?
En bachillerato… a partir del segundo año, me di cuenta que podía atraer la atención de mi entorno, hacer amigos, caer simpático y de alguna forma ser aceptado por mis compañeros.
¿Tienes cada rutina humorística preparada o hay mucho de improvisación en cada show?
Preparo parte del material para empezar, dependiendo del show que esté haciendo; en una época teníamos 15 shows distintos y ¡se me confundían! Pero la improvisación es un porcentaje alto.
¿Tu época de imitador pasó? ¿Te va mejor con los personajes que creas?
Desde los personajes de los 90’s me di cuenta que podía crear con caracterizaciones combinadas, personajes que parecían de la vida real y que tenían una gran aceptación en el público.
De los personajes que has interpretado, nómbranos el que te ha hecho más famoso, el que más te ha hecho reír a ti, el que te haya causado tristeza, y el que quieres hacer que no has hecho?
Creo que la fama viene no por un solo personaje sino de la habilidad de cambiar de uno a otro. La versatilidad, que un personaje no se pareciera a otro. Nunca me causaron tristeza, aunque perolito estaba lleno de ternura. Y aún no sé cuál será el próximo personaje.
¿Te tomas el amor tan en serio como el humor?
No… creo que soy muy relajado en el amor. El humor si me lo tomo muy en serio, porque al fin y al cabo, ¡es mi trabajo y de eso vivo!
¿Escapa el humor de la crisis en el país?
No escapa, a pesar de que la gente demanda cada vez más humor, pero los funcionarios del régimen debido a su gran ignorancia, piensan que el humor es el enemigo, cuando en realidad aquellos que tienen buen humor destacan entre los analfabetos y caen mejor. Pero nos han perseguido por eso.
¿Hay motivos para reírse en Venezuela?
Toda aquella risa producida por cualquier cosa que no sea el fracaso del gobierno venezolano, la desgracia de la población y la situación social, económica y política actual, es buen motivo para reír .
¿En quién crees y a quién admiras?
Creo en los seres humanos honestos y que no mienten; admiro a aquellos que anteponen su prestigio sobre su fortuna o sus posibilidades de enriquecerse.
¿Qué piensas de la apatía del venezolano?
Tiene una causa justificada: no se meten con un grupo de políticos equivocados, se están metiendo con pranes, mafia, asesinos y hampa común. Es normal ser apático cuando sabes perfectamente que no habrá justicia.
¿Has pensado alguna vez en emigrar de Venezuela?
¡Claro! Como todos hemos pensado alguna vez. Pero quiero mucho al país que hizo de mí lo que nunca soñé con ser. Le debo mucho. No quiero dejarme asesinar por los que están robando el dinero de los venezolanos, pero mientras pueda seguir enviando el mensaje de venezolanidad a los compatriotas que están fuera y los que están dentro, seguiré haciéndolo.
¿Qué es la patria para ti y qué te mantiene en Venezuela?
Creo que nacer en un país te hace no su dueño, pero si su cuidador, su vigilante. Los venezolanos tenemos que cuidar un extraordinario paisaje lleno de facilidades para producir riqueza, porque sobra el que nace para aprovecharse y cree que si no se lo roba él se lo roba otro.
¿Sigue habiendo trabajo para ti en Venezuela?
Si. Y más que nunca ahora el público asiste a los teatros. A pesar de que no se obtenga una contraprestación adecuada.
¿Dónde crees que está el final de este gobierno?
En la decisión de cada venezolano, en la educación que adquiera a pesar del afán de la deseducación; creo en el buen consejo de los buenos dirigentes, en la inteligencia de los que se fueron, para que aprendan a ayudar desde afuera sin ponerse a pedirle a los estudiantes que desafíen a los colectivos en la calle, sino denunciando con inteligencia.
¿A quién postularías para ser el próximo/a Presidente de Venezuela?
Creo que nosotros debemos evolucionar como pueblo para que cada quien tenga claro qué es lo que está bien o mal, y no para dejarle todo a un solo hombre. Sin embargo en esta etapa de ignorancia deberemos escoger un líder inteligente y que pueda luchar contra la maquinaria de descalificación que se pondrá en marcha.
Cuéntanos sobre ¿cómo es vivir la “Histeria de Venezuela”, el show que estarás presentando en Houston junto a Laureano Márquez?
Nuestra historia está llena de adornos adecuados a la época, nadie creería que fue más creíble de lo que se escribió. Pero el poder del humor deja sembrada la duda en el espectador inteligente, pues contar la historia en humor y más cercana a lo que de verdad pasó, la hace más interesante ¡y más de verdad!
¿Consideras a Laureano Márquez el par perfecto para el trabajo que realizan ambos?
Laureano Márquez es el compañero perfecto para cualquier humorista que quisiera triunfar: escribe y actúa, amén de insertar en sus discursos las más profundas reflexiones. Interpretar un guión de Laureano es un privilegio que pocos han tenido. Me considero con suerte, porque también es mi amigo.
¿Cuáles son tus próximos proyectos?
Quisiera apostar por un local de comedia en Venezuela y seguir visitando venezolanos por el mundo, y ahora más, que el gobierno me dejó tanto tiempo libre.
Desde El Venezolano de Houston le auguramos a Emilio muchísimos éxitos y esperamos sus visitas frecuentes a esta ciudad donde se le admira tanto.
Entradas están a la venta en www.histeriadevenezuela.com