“Este ruptura de las normas democráticas y constitucionales daña enormemente las instituciones democráticas de Venezuela y niega a los venezolanos el derecho a dar forma a su futuro a través de sus representantes electos”, indicó Mark Toner, portavoz del Departamento de Estado.
“Lo consideramos un grave retroceso para la democracia en Venezuela”, añadió.
Por medio de dos fallos, uno realizado el día martes y otro el miércoles, el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela retiró la inmunidad de los diputados de la Asamblea nacional, en su mayoría opositora, y asumió las funciones de la misma.
Por lo que Washington condenó “la decisión de usurpar los poderes de la Asamblea Nacional democráticamente electa”.
El gobierno estadounidense reiteró su llamado al gobierno venezolano para que permita al Parlamento “ejercer sus funciones constitucionales, realice elecciones tan pronto como sea posible y libere de inmediato a prisioneros políticos”.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: EFE