Según los servicios de rescate “cinco personas seguían sepultadas bajo una gran cantidad de nieve”.
Los empleados de la estación de Tignes fueron los encargados de alertar a las autoridades y al servicio de rescate cuando desde lo lejos se percataron del impresionante alud de 400 metros de largo.
“Una placa de hielo se soltó tras el paso de un grupo de esquiadores que estaban de vacaciones en la estación”, decía el comunicado.
Los equipos de rescate fueron desplegados de inmediato, apoyados por perros y monitores de esquí.
Se trata del accidente más grave desde que comenzó la temporada de esquí en Francia, la cual inició tarde este año por falta de nieve.
Muchas de las víctimas eran de la misma familia, al parecer eran todos franceses y portaban dispositivos geolocalizadores.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: Twitter