Por lo que centenares de manifestantes desafiaron el toque de queda y recorrían las calles del centro de Charlotte bajo la atenta mirada de efectivos de la Guardia Nacional.
La noche del jueves, las autoridades tuvieron que lanzar gases lacrimógenos para dispersar a un grupo de personas que bloqueaba una de las autopistas más importantes de la ciudad.
Hasta el momento, cientos de personas caminan por el centro de Charlotte coreando consignas en un ambiente de calma y llevando pancartas en las que se pueden leer mensajes como “Dejen de matarnos”.
La alcaldesa, Jennifer Roberts, decretó un toque de queda el jueves a partir de la medianoche, hasta las 6 de la mañana (5:00 a.m hora Houston) para así impedir que se agrave la situación.
Según el jefe de la policía de la localidad, Kerr Putney, ahora cuentan con los recursos necesarios que les permitirán proteger la infraestructura y ser mucho más eficientes.
El miércoles en horas de la madrugada, 44 personas fueron detenidas en Charlotte, informó Putney, mientras que un manifestante recibió una herida mortal y dos policías resultaron heridos.
Iveth Villalobos / EV Houston / Foto: EFE