Uruguay no quiere ser visto como un destino del turismo cannábico sino como un país singular por sus excepcionales recursos naturales, culturales y de ocio que además se ha convertido en un Estado innovador en la forma de luchar contra el narcotráfico, dijo a Efe la ministra de Turismo, Liliam Kechichián.
La ministra resaltó, en una entrevista concedida a la Agencia Efe, que dado que la regulación de la marihuana en el país austral fue concebida como una herramienta para luchar contra el narcotráfico nacional no se planteó la posibilidad de habilitar su compra por parte de turistas en los puntos de venta legalmente autorizados.
“Nosotros esto lo planteamos como una política interna de lucha contra la droga para nuestra sociedad y el turista que llega al Uruguay tiene que saber que no va a poder comprar el cannabis en farmacias”, explicó Kechichián.
“Cuando se discutió el proyecto de ley que habilitó la regulación del cannabis en Uruguay quedó muy claro que no queríamos un turismo cannábico”, sino la implantación de un sistema basado en el papel del Estado como el gran regulador que con políticas hasta ahora no vistas haga frente al narcotráfico y acabe con él.
La jerarca sostuvo que la regulación del mercado de marihuana es afrontada desde su Ministerio de “una forma diferente”, enfatizando en el hecho de que Uruguay se posiciona como un “país innovador” en esta materia por ser el primero en la región en aprobar una iniciativa de este tipo.
En ese sentido, la ministra dijo que la compraventa de marihuana controlada tiene un impacto “sumamente positivo”, que se suma a otros logros de Uruguay, como el hecho de que fue el primer país en permitir el voto femenino y el divorcio en América Latina, lo que marca su histórica búsqueda por la garantía de derechos.
“Tenemos una agenda de derechos que es innovadora, como por ejemplo en el matrimonio igualitario, ya que en América Latina somos uno de los pocos países que lo tiene, y en los temas referidos al colectivo LGBT, aspecto en el que somos el país más amigable de la región, y eso es innovación pura”.
En esa línea, la ministra resaltó que si bien es un “pequeño país”, Uruguay ha ejercido iniciativas innovadoras como el Plan Ceibal, que proporcionó una computadora a cada niño, o la trazabilidad de su carne, que da mayor seguridad al consumidor con respecto al producto al tener controlada informáticamente la evolución de todas las reses, desde su nacimiento hasta la muerte.
Es importante recordar que Uruguay se convirtió el pasado miércoles en el primer país del mundo en controlar de principio a fin la producción y compraventa de marihuana de uso recreativo con su dispensación en farmacias.
Hasta el momento la venta está habilitada solo en 16 farmacias ubicadas en 11 de los 19 departamentos del país, en envases de cinco gramos a un precio de 187,04 pesos uruguayos (unos 6,5 dólares).
EFE / Foto: Referencial